lunes, 30 de marzo de 2009

BASTET


Bastet
Bastet es una
diosa de la mitología egipcia, también denominada Bast, cuya misión era proteger el hogar y simboliza la alegría de vivir, pues se considera la deidad de la armonía y la felicidad.
Nombre egipcio: Bastet. Nombre griego: Bastis. Deidad griega:
Artemisa. Deidad romana: Diana.


Iconografía
Se la representaba bajo la forma de un
gato doméstico, o bien como una mujer con cabeza de gato, que siempre lleva un sistro (instrumento musical) debido a que le agradaba especialmente que los humanos bailaran y tocaran música en su honor.
Mitología
Es la personificación de los cálidos rayos del Sol y ejercía sus poderes benéficos. Encarnaba los aspecto pacíficos de diosas peligrosas como Sacmis, que expresaba las cualidades maléficas del Sol. Como ojo de Atum, estaba asociada a la Luna y protegía los nacimientos y a las embarazadas de las enfermedades y los malos espíritus.
Se muestra como una diosa pacífica, pero cuando se enfada se transforma en una mujer con cabeza de leona, asimilándose a la diosa Sejmet. En determinadas ocasiones, se transformaba en la mucho más violenta diosa
Sejmet, patrona de las guerras y dotada de cabeza de león. Al igual que el animal totémico que la representa, Bastet era una diosa impredecible que podía mostrarse tierna o feroz en cualquier momento.
Algunas veces aparece como hija de Ra o Atum, tomando como madre a Hathor o a Tefnut. En otras ocasiones, forma tríada con Atum o Mahes "El León de Mirada Feroz" como esposos, y con Horhekenu como hijo. Desde el Imperio Antiguo, es la madre del rey, al que ayuda y protege para alcanzar el cielo.
Se la identificaba con la estrella
Sothis, de quien se la consideraba Señora. Según algunos eruditos, como M. Oldfield Howey, su nombre significa la desgarradora, pese a su carácter principalmente benigno.

Culto

Su culto se remonta a los primeros tiempos de la civilización egipcia, habiendo ganado notoriedad más tarde, y se la menciona en los
Textos de las Pirámides y el Libro de los Muertos.
La antigua ciudad de
Bubastis (hoy Zagazig, en el delta del Nilo) estaba consagrada a su culto, y de allí proceden centenares de gatos momificados que fueron enterrados en su memoria. Su culto fue tan importante que en sus templos se criaron gatos que eran su representación, y a la muerte de éstos, eran cuidadosamente momificados, enterrándolos en tumbas específicas para ellos. Encontramos necrópolis de este tipo en Bubastis, Saqqara, Tanis, Beni Hassan y Tebas.
Los egipcios consideraban a los gatos como manifestaciones de la diosa Bastet y, cuenta la leyenda, que se rendían ante los persas cuando éstos sostenían gatos frente a sus escudos, ya que los persas sabían que los egipcios eran capaces de rendirse antes de lastimar a algún gato. Así fue como perdieron a la ciudad de Pelusio, la actual
Puerto Said.
En honor a esta diosa en la ciudad de Bubastis se celebraba la "Fiesta de la embriaguez", donde se consumía vino en abundancia, se bailaba y se hacía sonar la música. Esta fiesta se realizaba para que la diosa Bastet se mostrara contenta y halagada, y de este modo no tomara el aspecto de una leona enfurecida.

2 comentarios:

Raziel dijo...

Siempre me ha fascinado este animal que ronronea dulcemente en tu regazo y en segundos parece despreciar tu vano intento de pensar que le posees,el dicta las normas a seguir en la relación con los humanos.

De hecho ya tuve una gata o me tuvo ella a mi no lo se muy bien jajjja y ahora mismo tengo a mi lado durmiendo plácidamente a la segunda enroscada como un suave cojín azabache.

Aún hay noches que la primera que tenía por nombre Dana,me visita en mis sueños,jamás la olvidaré,una auténtica pantera en miniatura que todos detestaban por su carácter irascible y feroz y que tan solo a mi me concedia el privilegio de servirle como almohada,¿¿cuantas noches cómplices tuvimos comunicándonos en un idioma que solo entendiamos ella y yo??.

han pasado años y aún me sigo emocionando al recordarla.

Anónimo dijo...

Buenas noches

It is my first time here. I just wanted to say hi!